"MOTT THE HOOPLE" (ISLAND, 1969)
Para la grabación de este primer álbum, Guy Stevens sugirió a los miembros de Mott the Hoople que debían sonar como Bob Dylan cantando para los Rolling Stones, un objetivo que fue conseguido en parte. El disco incluía una serie de versiones al estilo Dylan y varios temas rock originales bastante alternativos. También hay que tener en cuenta que el vocalista Ian Hunter se había unido al grupo muy poco antes de la grabación del disco, y ni siquiera había tenido oportunidad de actuar en directo con la banda.
El segundo disco de la banda, titulado “Mad Shadows” y publicado por Island en 1970, supuso un serio patinazo para Mott the Hoople, pues les hacía parecer como una panda de hippies mal grabados tocando hard-rock. Y ciertamente se cometieron graves errores en la grabación del álbum, por ejemplo, se puede escuchar con bastante claridad un chirrido bastante molesto procedente del pedal del bombo de la batería. En general, el sonido del álbum es muy pobre, cuando se le podía haber sacado mejor partido a las canciones, que no son tan malas como parecen en una primera escucha. De este modo, no es de extrañar que el disco vendiera poco y que recibiera críticas en su mayor parte negativas.
"WILDLIFE" (ISLAND, 1971)
Si “Mad Shadows” fue una decepción y presentaba un sonido bastante pobre, el siguiente álbum de Mott the Hoople fue aún peor. Se tituló “Wildlife”, vida salvaje, y en él predominaban los instrumentos acústicos, en una especie de country-hippy que no le iba nada bien al grupo. Mott the Hoople se encontraban totalmente perdidos en su orientación musical y ni siquiera ellos mismos estaban convencidos de su sonido. Tanto es así, que los miembros de la banda llamaban al disco “Mildlife”, vida suave o amable, en lugar de vida salvaje. Ciertamente su música se había suavizado bastante respecto a sus dos primeros discos.
"BRAIN CAPERS" (ISLAND, 1972)
Tras el éxito de su single “All the young dudes”, Mott the Hoople grabaron un album con el mismo título y producido por David Bowie. Salió en el sello Columbia y supuso un giro radical en la carrera del grupo, incorporándose al movimiento glam, que entonces estaba en pleno ascenso. Una renovación de su sonido que, ahora sí, hacía creer a los miembros de la banda que su lugar en la música rock podía ser importante y que aún les quedaba mucho por decir y mucha guerra que dar.
Para la grabación de este primer álbum, Guy Stevens sugirió a los miembros de Mott the Hoople que debían sonar como Bob Dylan cantando para los Rolling Stones, un objetivo que fue conseguido en parte. El disco incluía una serie de versiones al estilo Dylan y varios temas rock originales bastante alternativos. También hay que tener en cuenta que el vocalista Ian Hunter se había unido al grupo muy poco antes de la grabación del disco, y ni siquiera había tenido oportunidad de actuar en directo con la banda.
"MAD SHADOWS" (ISLAND, 1970)
El segundo disco de la banda, titulado “Mad Shadows” y publicado por Island en 1970, supuso un serio patinazo para Mott the Hoople, pues les hacía parecer como una panda de hippies mal grabados tocando hard-rock. Y ciertamente se cometieron graves errores en la grabación del álbum, por ejemplo, se puede escuchar con bastante claridad un chirrido bastante molesto procedente del pedal del bombo de la batería. En general, el sonido del álbum es muy pobre, cuando se le podía haber sacado mejor partido a las canciones, que no son tan malas como parecen en una primera escucha. De este modo, no es de extrañar que el disco vendiera poco y que recibiera críticas en su mayor parte negativas.
"WILDLIFE" (ISLAND, 1971)
Si “Mad Shadows” fue una decepción y presentaba un sonido bastante pobre, el siguiente álbum de Mott the Hoople fue aún peor. Se tituló “Wildlife”, vida salvaje, y en él predominaban los instrumentos acústicos, en una especie de country-hippy que no le iba nada bien al grupo. Mott the Hoople se encontraban totalmente perdidos en su orientación musical y ni siquiera ellos mismos estaban convencidos de su sonido. Tanto es así, que los miembros de la banda llamaban al disco “Mildlife”, vida suave o amable, en lugar de vida salvaje. Ciertamente su música se había suavizado bastante respecto a sus dos primeros discos.
"BRAIN CAPERS" (ISLAND, 1972)
Después de la decepción de sus dos últimos discos, Mott the Hoople grabaron una de esas joyas ocultas que pasan desapercibidas en su momento y que con el tiempo no son valoradas en toda su dimensión. Un disco infravalorado, que se tituló “Brain Capers” y que salió en noviembre del año 1971 con poco éxito de ventas, de hecho, ni siquiera entró en las listas.Sin embargo, este álbum supone un regreso a su sonido más duro y rockero de sus inicios, con el que la banda se encontraba más a gusto. Como curiosidad, decir que en un principio se iba a titular “AC/DC”, pero finalmente este título fue desechado.
"ALL THE YOUNG DUDES" (COLUMBIA, 1972)
Cuando parecía que todo había terminado para Mott the Hoople, David Bowie, que siempre había sido un seguidor de la banda, acudió a su rescate. Les convenció para que siguieran juntos y les ofreció una de sus canciones, “Suffragette City”, que luego sería incluida en su propio álbum “Ziggy Stardust”, que aún no había sido publicado. Sin embargo, Mott the Hoople, rechazaron esta canción, pero les gustó otra que David Bowie tocó para ellos, “All the Young dudes”. Ian Hunter y sus compañeros terminaron grabando este tema, que saldría como single en julio de 1972 y se convertiría en su mayor éxito. Por fin lo habían conseguido.
Tras el éxito de su single “All the young dudes”, Mott the Hoople grabaron un album con el mismo título y producido por David Bowie. Salió en el sello Columbia y supuso un giro radical en la carrera del grupo, incorporándose al movimiento glam, que entonces estaba en pleno ascenso. Una renovación de su sonido que, ahora sí, hacía creer a los miembros de la banda que su lugar en la música rock podía ser importante y que aún les quedaba mucho por decir y mucha guerra que dar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario