La resurrección artística y personal de Mike Farris, el que fuera cantante de los geniales Screamin’ Cheetah Wheelies, es una magnífica noticia para todos los aficionados al rock y se ha podido comprobar en su reciente gira por España junto a la Roseland Rhythm Revue. Farris ha abrazado la fe cristiana, que le ha ayudado a salir del pozo, y ahora muestra en su música la influencia del góspel. Para celebrarlo vamos a realizar un repaso a sus discos en solitario, comenzando por su álbum de 2002, el de su regreso, titulado “Goodnight Sun”.
En este disco, todavía le acechaban sus demonios personales y tuvieron que transcurrir cinco años, hasta 2007, para que Farris regresara totalmente desintoxicado y con renovado vigor, presentando un álbum que lo decía todo ya desde su propio título, “Salvation in lights”, y que mostraba una notable influencia de la música sureña. Un disco repleto de canciones espirituales y religiosas, entre las que podemos encontrar el explícito tema, en cuanto a la definición de su propia situación personal, “Can’t no grave hold my body down”, ninguna tumba puede retener mi cuerpo.
Y desde 2007 Mike Farris ha publicado dos álbumes en directo, el primero de ellos titulado “Sunday night shout!”, grabado en Nashville el 12 de octubre de 2008, y el segundo, “Shout! Live”, ya junto a la Roseland Rhythm Revue, que es la banda que le sigue acompañando en la actualidad, y en el que también colaboran las McCrary Sisters.
No hay comentarios:
Publicar un comentario