“Tender Prey” era el quinto álbum de Nick Cave y sus malas semillas, poniendo punto y final a su etapa berlinesa, la más oscura y excesiva de su trayectoria artística.
Con el cambio de década, Nick Cave se trasladó a Brasil, donde grabaría su siguiente disco, titulado “The good son”, que en un principio tuvo una mala recepción tanto por parte de sus admiradores como por los críticos que no aceptaron el giro que representaba hacia su faceta más lírica y sentimental que le alejaba totalmente de la vertiente más visceral y violenta de sus anteriores trabajos.
Este cambio fue motivado por su nueva relación sentimental con la artista brasileña Viviene Carneiro así como por su reciente cura de desintoxicación. Esta nueva situación produjo un álbum lleno de temas lentos y preciosistas, con envolventes orquestaciones de cuerda y letras minimalistas de fuerte carga espiritual.
Desde su publicación no ha cesado de incrementarse su valoración, siendo considerado actualmente como una de sus obras cumbres.
Este cambio fue motivado por su nueva relación sentimental con la artista brasileña Viviene Carneiro así como por su reciente cura de desintoxicación. Esta nueva situación produjo un álbum lleno de temas lentos y preciosistas, con envolventes orquestaciones de cuerda y letras minimalistas de fuerte carga espiritual.
Desde su publicación no ha cesado de incrementarse su valoración, siendo considerado actualmente como una de sus obras cumbres.
Cerrando esta triple entrega de reediciones, “Henry’s dream” se trata de un disco controvertido, tanto por su difícil gestación, pues Nick Cave no quedó satisfecho con la producción del mítico David Briggs, como por su resultado, que marcó una nueva dirección en la obra del cantante australiano, inclinada hacia las baladas trágicas y de temática escabrosa. No obstante, su recepción fue mucho más positiva que con su anterior disco, y sigue siendo una de las obras preferidas por sus admiradores.
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